El director de Policarirubana, comisionado jefe Jesús López Marcano, reiteró su llamado al poder judicial, al Ministerio Público así como a las autoridades de la Comunidad Penitenciaria de Coro y la Secretaría de Orden Público de la Gobernación del estado Falcón, en torno a la “delicada situación por la cual atraviesa la policía municipal de” debido al hacinamiento en las celdas y la imposibilidad de suministrarles alimentos y medicamentos a los reclusos. Asimismo, llamó la atención sobre la necesidad de descongestionar estos espacios ya que la situación está incidiendo en la prestación del servicio a las comunidades toda vez que se deben usar más funcionarios para resguardar las instalaciones y evitar fugas.
López mostró las comunicaciones enviadas el pasado mes de mayo a las autoridades, en donde se asegura que el CDP solo cuenta con una celda de 7,12 metros cuadrados dividida en tres cubículos, cuya capacidad es para 15 reclusos y hoy alberga a 105. Indicó que en una de las oficinas del cuerpo policial permanecen 39 reclusos de conducta moderada, en otro espacio están cuatro mujeres, una de ellas funcionaria policial, mientras que en un cuarto lugar hay siete funcionarios policiales. Ninguno es apto para recluir privados de libertad. A la fecha la cifra se ha elevado a 160.
En la correspondencia se solicita el traslado a la Comunidad Penitenciaria de los 17 penados que se encuentran en el CDP, celeridad procesal, descongestionamiento y valoraciones médicas periódicas ante la presencia de enfermedades contagiosas como escabiosis, hepatitis, tuberculosis, VIH, entre otras.
Llama la atención acerca de la presencia de dos adolescentes entre la población reclusa.
En 2017, López Marcano hizo llamados de atención en torno a la problemática en el CDP sin respuesta por parte de las autoridades.
Eva Riera, Equipo UVL
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