El pasado 26 de septiembre se les realizó la audiencia preliminar a los cinco adolescentes detenidos en el marco de las protestas post electorales, tras ratificarles la privativa de libertad y pasarlos a juicio, sus familiares exigieron justicia.
Los cinco jóvenes fueron detenidos en los municipios Cocorote, La Trinidad y San Felipe y desde ese momento los tienen bajo custodia en el Centro de Coordinación Policial de la urbanización Juan José de Maya en el municipio San Felipe.
Ante ello, familiares exigen justicia en el caso al considerar que los cinco menores de edad son inocentes de los delitos de terrorismo e incitación al odio, los cuales les imputaron desde un primer momento.
El caso está a orden de la fiscalía N°79 del Ministerio Público nacional y N°9 en el estado Yaracuy.
Sobre las detenciones
Tres de los cinco detenidos fueron capturados en Cocorote, uno en la San Felipe y otro en Boraure, municipio La Trinidad. Todos esos procedimientos fueron ejecutados el martes 30 de julio, dos días después de las elecciones.
En cuanto a los cocoroteños se supo que para el momento habían ingresado a la casa de un vecino que les ofreció refugio cuando notó que ellos salían de practicar fútbol en la cancha y la Guardia Nacional Bolivariana los capturó por sospechar que hacían parte de un grupo de ciudadanos que manifestaban cerca del lugar.
Sobre el adolescente de 14 años arrestado en San Felipe, el día de la detención regresaba de practicar beisbol en Independencia, razón por lo que se dirigía a su residencia y, presuntamente, pasó cerca de una protesta cuando lo detuvieron.
El caso del menor de 17 años en Boraure, municipio La Trinidad, sucedió en el sector Buena Vista por donde se dirigía para visitar a su novia en compañía de un amigo también adolescente, quien logró huir de la redada policial ya que igualmente en la zona se desarrollaba un conato de protesta y ahora lo involucran de ser partícipe de una manifestación ocurrida en San Felipe.
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