En el estado Amazonas, específicamente en Puerto Ayacucho es donde están ubicados los organismos policiales y militares que funcionan como centros de detención preventivos, la población privada de libertad sigue siendo pequeña comparada con otros Estados del país, no hay cárceles y los centros de detención son pocos.
En lo que va de 2024, hemos reportado una huelga de hambre en el Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalística (Cicpc), el hecho se dió a conocer a través de una carta que hicieron llegar los privados de libertad a sus familiares, en la misiva se lee “no gozamos del sol, del deporte, la cultura, el estudio… y (pedían) nos garanticen la salud” también pedían respeto para sus familiares y que se extendiera el tiempo de visita.
Parte de las exigencias de los privados de libertad y que hacen llegar a través de sus familiares es poder salir de la celda, “la celda donde están los muchachos es muy pequeña y no les permiten salir ni a llevar sol, menos practicar alguna actividad deportiva” así lo indicó la tía de un privado de libertad que está recluido en el Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalística.
Otro familiar consultado por Una Ventana a la Libertad indicó que en el Cicpc se han registrado unas dos huelgas de hambre, y la exigencia de los reclusos es ser trasladados a centros como la Policía Estadal o la Policía Municipal, éstas acciones son desconocidas por la opinión pública y hasta por los familiares porque no llegan a las 48 horas y porque los efectivos policiales hacen requisas para quitarles lápiz y papel y que no puedan comunicarse con sus allegados; “a ellos les hacen cosas, y nosotros nos enteramos cuando vamos a llevarles la comidita, no denunciamos porque ellos nos conocen (en
referencia a los efectivos policiales) y no queremos que los maltraten, dijo la madre de un detenido.
Por otro lado, el padre de un privado de libertad que se encuentra en la sede de la Policía Nacional Bolivariana con respecto a si han realizado algún tipo de protesta señaló “protesta como tal no, a través de comunicaciones solicitamos o nos vamos por la parte protocolar… en el caso de cuando están enfermos que permitan ir a un médico privado, y en algunos casos en las cartas que hemos enviado es que ellos tengan esparcimiento y que puedan llevar sol”. También dijo que los detenidos deben pagar 5.000 mil pesos cada uno para poder salir a la cancha a jugar pelota, ellos no denuncian esa situación por temor a perder la oportunidad que tienen de salir de la celda. Hay varios centros que no garantizan que los detenidos puedan salir a las áreas externas, por no contar con espacios para ello.
Se considera que en el estado Amazonas no hay retardo procesal, que es uno de los principales reclamos que llevaron a una convocatoria nacional de huelga general, por eso los detenidos de ningún centro se unieron a esa huelga, así lo señaló un trabajador del poder judicial que pidió no ser identificado, los privados no se apegaron al llamado a huelga, considerando que su realidad es distinta a los centros carcelarios del centro del país; les permiten el régimen de visitas de familiares, ingreso de alimentos, agua, y atención medica al menos una vez cada quince días.
Es importante acotar que en el estado Amazonas todos los organismos de seguridad no cuentan con una infraestructura acorde para albergar tantas personas privadas de libertad, eso trae como consecuencia el hacinamiento en todos los espacios.
En el estado Amazonas, específicamente en Puerto Ayacucho es
donde están ubicados los organismos policiales y militares que funcionan como
centros de detención preventivos, la población privada de libertad sigue siendo
pequeña comparada con otros Estados del país, no hay cárceles y los centros de
detención son pocos.
En lo que va de 2024, hemos reportado una huelga de hambre en el
Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalística (Cicpc), el
hecho se dió a conocer a través de una carta que hicieron llegar los privados
de libertad a sus familiares, en la misiva se lee “no gozamos del sol, del
deporte, la cultura, el estudio… y (pedían) nos garanticen la salud” también
pedían respeto para sus familiares y que se extendiera el tiempo de visita.
Parte de las exigencias de los privados de libertad y que hacen
llegar a través de sus familiares es poder salir de la celda, “la celda donde
están los muchachos es muy pequeña y no les permiten salir ni a llevar sol,
menos practicar alguna actividad deportiva” así lo indicó la tía de un privado
de libertad que está recluido en el Cuerpo de Investigaciones Científicas,
Penales y Criminalística.
Otro familiar consultado por Una Ventana a la Libertad indicó
que en el Cicpc se han registrado unas dos huelgas de hambre, y la exigencia de
los reclusos es ser trasladados a centros como la Policía Estadal o la Policía
Municipal, éstas acciones son desconocidas por la opinión pública y hasta por
los familiares porque no llegan a las 48 horas y porque los efectivos
policiales hacen requisas para quitarles lápiz y papel y que no puedan
comunicarse con sus allegados; “a ellos les hacen cosas, y nosotros nos
enteramos cuando vamos a llevarles la comidita, no denunciamos porque ellos nos
conocen (en
referencia a los efectivos policiales) y no queremos que los
maltraten, dijo la madre de un detenido.
Por otro lado, el padre de un privado de libertad que se
encuentra en la sede de la Policía Nacional Bolivariana con respecto a si han
realizado algún tipo de protesta señaló “protesta como tal no, a través de
comunicaciones solicitamos o nos vamos por la parte protocolar… en el caso de
cuando están enfermos que permitan ir a un médico privado, y en algunos casos
en las cartas que hemos enviado es que ellos tengan esparcimiento y que puedan
llevar sol”. También dijo que los detenidos deben pagar 5.000 mil pesos cada
uno para poder salir a la cancha a jugar pelota, ellos no denuncian esa
situación por temor a perder la oportunidad que tienen de salir de la celda.
Hay varios centros que no garantizan que los detenidos puedan salir a las áreas
externas, por no contar con espacios para ello.
Se
considera que en el estado Amazonas no hay retardo procesal, que es uno de los
principales reclamos que llevaron a una convocatoria nacional de huelga general,
por eso los detenidos de ningún centro se unieron a esa huelga, así lo señaló
un trabajador del poder judicial que pidió no ser identificado, los privados no
se apegaron al llamado a huelga, considerando que su realidad es distinta a los
centros carcelarios del centro del país; les permiten el régimen de visitas de
familiares, ingreso de alimentos, agua, y atención medica al menos una vez cada
quince días.
Es
importante acotar que en el estado Amazonas todos los organismos de seguridad
no cuentan con una infraestructura acorde para albergar tantas personas
privadas de libertad, eso trae como consecuencia el hacinamiento en todos los
espacios.
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