Equipo UVL Carabobo
Valencia.- Un grupo de personas de diferentes estados del país que tienen algún miembro de la familia como preso político en el Complejo Penitenciario Carabobo (penal de Tocuyito), sostuvieron que les habían dicho que desde la semana pasada comenzaban las visitas, pero que esta medida fue abortada por las autoridades porque, supuestamente, este lunes 23 de septiembre comienzan las audiencias telemáticas.
Ante esta situación, manifiestan, que la visita que por ley ya les toca, puede verse directamente afectada por la programación y los resultados de las audiencias telemáticas.
Aunque ciertamente, sería beneficioso para los detenidos porque podrían quedar en libertad plena u obtener algún beneficio, pero esto no deja de generar incertidumbre y preocupación entre los familiares.
Además, la situación de los presos y las decisiones judiciales que se tomen durante estas audiencias podrían influir en la posibilidad de interacción con sus seres queridos, lo que resalta la importancia de un sistema judicial que garantice los derechos de todos los involucrados.
“Todos son inocentes”
Una ciudadana procedente de los andes dijo que cuando fueron a Caracas una abogada que funge como defensor público les dijo que “todos son inocentes”, y bueno, “yo espero que así sea”, apuntó.
También resaltó, que, con la detención de tantos inocentes, donde hay muchos enfermos con diversas patologías, el Gobierno nacional comete un gran daño: “Hay personas que se han complicado en salud porque están medicadas y no están cumpliendo con el tratamiento que les corresponde”.
Por otra parte, un carabobeño añadió, que en la puerta les han recibido medicamentos para algunas personas específicas, pero al final no las reciben los destinatarios.
“Mucho sufrimiento”
Las familias que esperan con ansiedad noticias sobre sus seres queridos aseguran que esto trae “mucho sufrimiento” porque ya desde que fueron detenidos, unos el 29 y otros el 30 de julio, ha desencadenado muchas calamidades en el torno familiar.
“A mi mamá le dio un ACV cuando se enteró que mi hijo, quien es su nieto, lo pusieron preso. Entonces mire usted, mi hijo inocente y preso, y mi mamá ahora enferma. Todas estas personas que usted ve aquí estamos sufriendo, padeciendo por las injusticias que están cometiendo con nuestros hijos, hijas, hermanos, hermanas, cuñados, yernos, tíos y hasta abuelos porque aquí hay personas de la tercera edad.
Además, entre los privados de libertad hay personas con discapacidad visual, síndrome de Down, entre otros.
“Somos pueblo y los que están presos por las protestas también son pueblo, aunque muchos, muchos, no estaban protestando porque algunos se dirigían a sus casas, a una farmacia o a un supermercado o carnicería”.
“Hay un señor de 73 años que privaron de libertad en Trujillo cuando iba a comprar carne para celebrar su cumpleaños, y mire a donde terminó a parar, al penal de Tocuyito”, agregó un familiar procedente de los andes.
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