
UVL Zulia
Esperó el día de la visita y sin el apoyo de sus compañeros de celda Dervis Benito Trujillo Barboza, de 27 años, intentó, el 24 de abril de 2019, tomar el control del Pabellón A del Centro de Arrestos y Detenciones Preventivas en San Carlos del Zulia, municipio Colón del estado Zulia, al sur del Lago de Maracaibo, en el occidente venezolano. Sus planes fueron truncados por el “Albani”, pran del área; sus escoltas mataron a tiros al recluso e hirieron a Víctor Alfonso Hernández, de 30 años.
El cadáver de Trujillo y el del sobreviviente lo cargaron sus compañeros de pabellón y lo dejaron en la entrada del retén para que los funcionarios del Cuerpo de Policía Bolivariana del Estado Zulia (CPBEZ) que custodian el área externa se hicieran cargo de las víctimas, comentó uno de los internos.
“A un lado de los dos baleados dejaron el revólver, calibre 38mm, serial N°484788, niquelado, empuñadura de madera color marrón, tambor contentivo de 5 cartuchos ajustados al cilindro, calibre 9mm, de los cuales 4 fueron percutidos y uno en estado original”, detalló uno de los oficiales.
Detectives del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas trasladaron el cadáver hasta la morgue del Hospital General de Santa Bárbara del Zulia. A Trujillo se le contabilizaron dos heridas de bala en la cabeza y una en el pecho. Mientras que el sobreviviente, quien hasta ahora y por testimonio de otros internos no estaba en la revuelta; los médicos del nosocomio le diagnosticaron heridas de arma de fuego en la cabeza y en la pierna derecha. Aún permanece recluido en el centro de salud y su condición es delicada.
Los oficiales indicaron que Trujillo ingresó al retén desde 2016 por el delito de robo agravado. Mientras que Hernández esperaba sentencia desde mediados de 2016 por el delito de robo de vehículo y agavillamiento.

Tras el incidente, el horario de la visita se acortó, sacaron a los familiares y una comitiva conformadas por oficiales de la Policía regional y la Guardia Nacional custodiaron el área externa para prevenir alboroto y controlar la salida de los visitantes.
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