Familiares de la población privada de libertad que se encuentra en los calabozos de la Comandancia General de la Policía en el municipio San Felipe, del estado Yaracuy, exigen a las autoridades una amplia jornada de atención médico para sus allegados.
Aseguran que hay varios privados de libertad con síntomas característicos de infección respiratoria, por lo que se piden al ente rector de la salud regional así como a la Secretaría de Seguridad Ciudadana del Ejecutivo regional atender la situación.
Señalan que van meses, incluso años sin atenderlos con jornada médicas.
Además están preocupados porque el centro de reclusión comienza a repoblarse a raíz del cierre del Internado Judicial en noviembre pasado.
«Tememos que el lugar se vuelva a hacinar como años atrás y esto traiga problemas que van desde el aspecto sanitario hasta el de seguridad para todos los reos», dijo la mamá de un privado de libertad vía telefónica.
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