En reiteradas oportunidades familiares de reclusos han denunciado que las medicinas que ameritan los presos enfermos deben ser adquiridos por ellos mismos.
Elvis Rivas
Un privado de libertad en la comandancia de policía del estado Mérida, ubicada en el sector Glorias Patrias de la capital andina, quien se encuentra recluido desde hace unos días en el Hospital Universitario de Los Andes (IHULA), recibió un donativo de materias e insumos médicos para que le sea tratada la enfermedad que padece.
Jhonatan Rivas fue trasladado al centro asistencial debido a que padece de úlceras en sus extremidades inferiores. Aún cuando ha recibido la atención médica necesaria, necesita de insumos y medicamentos para que le sea tratada la enfermedad. Por tal razón, recibió un donativo que según información policial, fue llevado al piso cuatro del centro de salud, dónde se encuentra desde hace unos días. El paciente recibió de parte del área de casos sociales del municipio Campo Elías, yelcos, gasas, guantes de algodón, antibióticos en ampollas, macrogoteros e inyectadoras, necesarios para su tratamiento.
Condición de los privados de libertadEn reiteradas ocasiones, familiares de reclusos de los diferentes centros de detención preventiva (CDP) de la entidad, han denunciado que cuando uno de los privados de libertad se enferma, los gastos e insumos médicos deben correr por cuenta de la familia. Señalan que aún cuando en ocasiones se llevan a cabo operativos médicos y jornadas sociales dentro de los retenes policiales, estos no cuentan con áreas acondicionadas y dotadas para la atención de personas enfermas.
De igual forma, los CDP, por su condición de reclusorios temporales, no están aptos para la permanencia de personas por largos periodos de tiempo, y mucho menos si padecen patologías que afectan la salud de quienes incluso, purgan condenas en estos sitios de reclusion.
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