UVL | Portuguesa
Los cuatro líderes negativos de la comandancia general de la Policía del Estado Portuguesa cumplen tres semanas recluidos en los calabozos de la policía científica sin que se les resuelva su traslado a un centro penitenciario, como lo ordenó la Comisión para la Revolución Judicial región los Llanos, a cuya cabeza están la diputada Jenny Cepeda y la jueza Anarexi Camejo. La ejecución de la medida está pendiente desde el miércoles 28 de julio.
En esa fecha, por órdenes de la comisión, las autoridades policiales realizaron una requisa extraordinaria en las celdas de su recinto principal, ubicada en Guanare, la capital de la entidad, y desmantelaron la banda de José Coromoto Andrades Parra, alias «El Puma”, quien junto a tres internos más controlaban el recinto y hacían los cobros por pernocta a los reclusos.
Los familiares de Andrades Parra acuden a diario al Palacio de Justicia, en Guanare, a reclamar al tribunal la aplicación de la medida de traslado, pero, según su testimonio, nadie los oye. Denunciaron a la UVL que entre los evacuados está un recluso en grave estado de salud. Se trata de José Daniel Rocha, uno de los tres aliados de «El Puma», diagnóstico de tuberculosis, por lo que solicitan a las autoridades se le preste la debida atención médica. “Sobreviven en condiciones no adecuadas: duermen en el piso y los mantienen desnudos e incomunicados”
«El Puma” es procesado por la comisión de los delitos de homicidio intencional y extorsión desde hace más de 6 años, y aún no tiene sentencia firme. En la requisa se incautaron en poder de los detenidos sustancias estupefacientes, armas blancas y otras de prohibido porte.
«El Puma» y sus tres aliados fueron expulsados del centro policial y entregados bajo custodia a la delegación municipal Guanare del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalística (Cicpc) donde permanecen sin destino cierto.
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