El privado de libertad nació con hidrocefalia y padece de convulsiones. Está medicado con Carbamazepina de 200 miligramos y, de acuerdo con la orden médica, debe consumir 600 mg diarios
Equipo UVL Miranda
Caucagua.- Familiares de un privado de libertad con condición especial recluido en los calabozos de la Delegación Caucagua del Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas (Cicpc), en el estado Miranda, denunciaron a Una Ventana a la Libertad que los funcionarios de ese organismo no le administran su tratamiento farmacológico completo.
El privado de libertad, identificado como Tadey José Pereira, de 21 años de edad, y tiene diagnóstico de hidrocefalia, retardo mental y trastornos convulsivos. Su condición especial lo mantiene con actitud agresiva y violenta, de acuerdo con la denuncia formulada por su prima Rosendy Castillo.
Castillo detalló que el recluso está medicado con Carbamazepina de 200 mg y debe consumir 600 mg diarios. Sin embargo, aseguró que los funcionarios del Cicpc de Caucagua no le administran la dosis diaria completa.
«A veces le dan 400 mg, otras veces no nos reciben los medicamentos y no le dan nada. Eso hace que convulsione y que mantenga su actitud agresiva. En algunas ocasiones lo han sacado al Hospital de Caucagua, pero otras veces son los mismos presos quienes lo ayudan y lo auxilian», declaró.
Pereira está detenido desde 2019, acusado de abuso sexual. Aún en octubre de 2021 está a la espera de juicio, lo que deja ver el retardo procesal.
Castillo también indicó que la Comisión Presidencial para la Revolución Judicial no ha llegado a este centro de detención preventiva, por lo tanto, el caso de Tadey José Pereira se encuentra paralizado.
Por su parte, la abuela del preso, Eduardo Pereira pidió al sistema judicial venezolano revisar este caso, ante la condición de salud del privado de libertad.
«Lo han maltratado, le han dado golpes. Él nos cuenta cuando podemos visitarlo, además de que sabemos que no le dan las pastillas como corresponde, eso lo pone peor. Él es una persona especial, que no mide las consecuencias de sus actos», indicó.
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