
Una Ventana a la Libertad asegura que las cifras son “dantescas”
Insalubridad y gran hacinamiento predominan en centros de detención preventiva en Venezuela
Valencia (Especial).- Según el informe presentado por la ONG “Una Ventana a la Libertad”, en los centros de detención preventiva del país existe un hacinamiento de 430 por ciento aproximadamente, así como precarias condiciones de insalubridad por la presencia de enfermedades como tuberculosis, VIH, escabiosis, piojos, entre otras.
Estos datos fueron aportados por Carlos Nieto Palma, coordinador general de esa organización con casi 20 años que trabaja en la defensa de los derechos humanos de las personas privadas de libertad, quien se presentó en el Instituto de Estudios Jurídicos del Colegio de Abogados del estado Carabobo. Junto a él, participaron las periodistas Luisa Torrealba, de Caracas; y Tibisay Romero, de Valencia.
“Estamos dando a conocer los resultados de ese informe comprendido de enero a junio de este año con cifras verdaderamente dantescas. Estas condiciones infrahumanas se han agravado a raíz de las protestas ocurridas en el país desde hace tres meses, porque todas las personas que detienen protestando las trasladan a estos sitios donde se mezclan con presos comunes”, detalló Nieto.
Agregó el abogado que solamente en los centros de detención preventiva hay 48.000 personas privadas de libertad, y más 57.000 en las cárceles tradicionales, lo que suma una población de 105.000 privados de libertad en Venezuela, algo jamás visto la historia del país.
A su juicio, este incremento se debe al retardo procesal, pues de toda esta población, el 70 por ciento son procesados, es decir que no tienen aún una sentencia y no se sabe si son culpables o inocentes.
“El aumento de la población pudiera reflejar que los cuerpos policiales están funcionando muy bien y por eso tenemos mas presos. Pero lo que ocurre es que el poder judicial está trabajando muy mal, lo que ha hecho que las cifras vayan en aumento”, aseguró el representante de Una ventana a la Libertad.
Patrullas policiales usadas como celdas
Nieto Palma destacó además que la problemática que se vive en los centros de detención preventivos es algo nuevo dentro del sistema penitenciario, pues antes en los calabozos policiales los detenidos solo permanecían 48 horas y de allí se decidía si eran enviados a una cárcel.
“Adicionalmente –dijo- tenemos un 30 por ciento de los funcionarios policiales del país dentro de sus sedes cuidando a los presos, en vez de estar en las calles garantizando la seguridad pública. Tenemos también el caso de patrullas que se están usando en varias ciudades como calabozos porque no cuentan con espacio para meter a los presos”.
Explicó el activista de DDHH que toda esta problemática se ha agravado con las protestas, ya que, según el Foro Penal Venezolano, existen más de 4 mil personas detenidas en todo el país.
“Nuestro objetivo es darle visibilidad a esta grave situación que en materia de derechos humanos ocurre en el país y, a la vez, dar recomendaciones sobre las posibles soluciones, las cuales solo pueden ser aplicadas por el Estado, único responsable de acuerdo a la Constitución y las leyes”, puntualizó.
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