Equipo de UVAL en Apure
Apure.- Los familiares y compañeros de estudio de Kevin Alviery Lugo Guzmán de 23 años, estudiante del último año de medicina en la Universidad Rómulo Gallegos, detenido el 29 de abril en el estado Apure exigen justicia por el proceso que se le sigue en su contra por la presunta comisión del delito de tráfico de sustancias estupefacientes en modalidad de ocultamiento y luego que el tribunal penal del estado Apure ratificó la medida privativa de libertad en la audiencia de presentación el 3 de mayo, durante los próximos 45 días para continuar las investigaciones previstas en la ley.
Los días 2, 3 y 6 de mayo, los familiares y amigos organizaron jornadas de protesta en el Tribunal Penal y la avenida Caracas en San Fernando de Apure, no solo para declarar la inocencia del también deportista de la selección de yudo, sino además, solicitar los buenos oficios del Fiscal de la República, Tarek William Saab en aras de lograr la libertad de este joven apureño, próximo a obtener el título de médico.
Lugo Guzmán, no solo es estudiante del último año de medicina, sino también, atleta de artes marciales (judoka), recibe ayuda de sus familiares en el exterior mientras terminaba su carrera y trabaja en un lavado de su propiedad en San Fernando de Apure sustentado con su propio esfuerzo, revelan sus familiares ante Una Ventana a la Libertad.
En una denuncia pública difundida en redes sociales, los familiares alegan que Lugo fue víctima de extorsión y detenido de forma arbitraria el lunes 29 de abril del 2024 en horas de las 04:00 de la tarde por parte de los funcionarios de seguridad en el barrio Luis Herrera en San Fernando de Apure, sin presentar orden de captura.
Los amigos y familiares cuentan que al momento de la detención Lugo se encontraba dentro de su carro Ford Ka, en compañía de su hijo de dos años, quien presenció el momento cuando él y su padre fueron interceptados por efectivos de seguridad en una camioneta Hilux mientras el joven esperaba de su delegada de grupo de estudio, para hacerle entrega de documentos académicos.
“Los policías de inmediato le solicitaron a Kevin salir de su carro para presentar los documentos originales personales y del vehículo. Al momento de la revisión Kevin no portaba cédula de identidad, por lo cual los policías le pidieron al ahora detenido acudir al comando policial, esto a pesar que contaba con la licencia de conducir y el carnet universitario estudiantil. Lugo se negó a acatar la orden porque estaba en compañía de su hijo menor de edad por lo cual los policías le arrebataron a su hijo de sus manos y lo entregaron a un señor desconocido por la familia quien alegó había visto a Kevin de forma ocasional”, revela un familiar que pidió mantener su identidad en reserva.
Los familiares dan cuenta que el joven apureño fue llevado al comando a la fuerza, violentamente, con golpes y groserías, sin medir palabras. Al llegar al comando, los policías exigieron el pago de 5.000 dólares americanos, a cambio de la libertad de Kevin Lugo.
Los compañeros de clase dan fe de su buena conducta. “Es un muchacho sano, tranquilo, humilde, buena persona y de sentimientos nobles. Es triste que pierda la carrera de médico cirujano a seis meses de graduarse por delitos que no cometió. El día de su detención esperaba a la delegada para entregar las hojas del cumplimiento de las guardias y el servicio que le permitirían terminar sus estudios”, apuntó una amiga de Kevin Lugo.
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