
Eva Riera / UVL Falcón
El pasado 28 de diciembre, Día de los Inocentes, fue aprovechado por las autoridades del Cuerpo de Policía Bolivariana del estado Falcón para hacer un conteo de reclusos en los cuatro centros de detención preventiva (CDP) adscritos a esa dependencia estadal y revisar los calabozos a los fines de detectar orificios hechos para posibles fugas.
Según informó el comisario Oswaldo Rodríguez León, Secretario de Seguridad y Orden Público del gobierno de Falcón, se constató la presencia de 629 presos bajo la custodia de Polifalcón en las poblaciones de Coro, Punto Fijo y Tucacas. Entre ellos se encuentran nueve adolescentes que permanecen en una celda acondicionada en la sede de la Brigada Motorizada situada al noroeste de la capital falconiana ante la imposibilidad de ser recibidos en la Entidad de Atención a Adolescentes Varones de Coro, dependiente del Ministerio de Asuntos Penitenciarios.
Los presos fueron pasados al patio y reseñados nuevamente, incluida la toma de la huella dactilar para autenticar su presencia en el CDP. Mientras esto ocurría fueron revisados los calabozos. Informó ORL que esta semana fueron observados restos de escombros en los alrededores de una de las celdas, lo cual hizo sospechar de la existencia de un plan de fuga.
Una vez concluida la jornada, se reiteró el compromiso de permitir la visita de los hijos el venidero 31 de diciembre.
En Falcón, más de un mil detenidos permanecen recluidos ilegalmente en centros de detención preventiva adscritos a organismos de seguridad civiles y militares ante la negativa del Min Asuntos Penitenciarios de recibirlos en la Comunidad Penitenciaria de Coro. Muchos de ellos están condenados desde hace cinco años. Los CDP fueron creados para una permanencia de máximo 72 horas y no reúnen ni la capacidad ni las condiciones de seguridad propias de una cárcel.
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