Equipo UVL, Miranda
LOS TEQUES. Un detenido con esquizofrenia, uno con tuberculosis, seis con COVID-19 esperan atención médica mientras están detenidos en la sede del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc).
Maiker Oropeza, abogado defensor, señaló que de los detenidos en la sede de la policía científica no se han realizado traslados desde hace al menos siete meses, a controles médicos de pacientes con patologías infectocontagiosas. “Uno de los detenidos padece una patología mental y no ha recibido medicación ni consultas con especialista, lo que desmejora su condición de salud”, dijo.
Detalló el abogado que en los calabozos no tienen ni siquiera luz artificial. “Solo están alumbrados los pasillos de los calabozo”, dijo.
En los calabozos hay dos presos con tuberculosis, seis que fueron diagnosticados con COVID-19 y el resto con evidentes síntomas de desnutrición.
Oropeza detalló que esta semana introdujeron la solicitud de una medida humanitaria para estos privados de libertad con dolencias médicas y patologías crónicas.
En la sede del Cicpc los presos se mantienen hacinados. El pasado 30 de septiembre se fugaron cuatro detenidos de esos calabozos ubicado en la capital mirandina.
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