Angélica Lugo, UVL / Caracas
Cuatro días duraron en huelga de hambre los internos detenidos en los calabozos de la Policía Nacional Bolivariana, ubicados en Boleíta. Este lunes a las 6 de la mañana decidieron levantar el ayuno voluntario. Pero sus parientes manifestaron que sus peticiones se mantienen: exigen a las autoridades que activen la celeridad procesal, pese a la emergencia por el Covid-19.
“Estamos muy preocupados porque nuestros familiares no están siendo llevados a tribunales y sus casos pueden tener más retardo procesal que, de por sí, es muy precario”, destacó la madre de uno de los detenidos en ese centro de detención preventiva, también conocido como la antigua Zona 7 de la extinta Policía Metropolitana.
Los cuatro días que los reclusos de la PNB de Boleíta, que es la que registra más hacinamiento en el Área Metropolitana de Caracas, con más de 1000 privados de libertad, las esposas y madres de la población reclusa estuvo en las afueras de la comisaría atenta por si ocurría alguna emergencia.
En Polisucre, Polihatillo y Polibaruta también levantaron el ayuno
Funcionarios de las tres policías municipales confirmaron a UVL que la población penitenciaria detenida en esas sedes también levantó el ayuno voluntario. Aunque en Polisucre y en Polibaruta la huelga de hambre se mantuvo hasta el domingo 5 de abril, los intermos de Polihatillo la extendieron hasta este lunes 06 de marzo a las 8:30 am.
El director de Polihatillo, Comisario Sergio González, explicó que después de una charla con los reclusos y sus familiares, los privados de libertad procedieron a finalizar la huelga de hambre: “Ya se les empezó a pasar sus alimentos y todos los internos están bien”, precisó.
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