
Angélica Lugo, UVL / Caracas
Esposas y madres de la población reclusa detenida en los calabozos de la Policía Nacional Bolivariana, ubicados en Boleíta, denunciaron a Una Ventana a la Libertad que funcionarios de la PNB, encargados de la seguridad en el Metro de Caracas, no les permiten ingresar a ese transporte para ir a llevar alimentos a sus parientes en el centro de detención preventiva.
Esta irregularidad, según los testimonios, se registra en las estaciones de Plaza Venezuela y de La California: «Es una falta de conciencia que en plena pandemia los policías no nos permitan acceder a este transporte para llevarle comida a nuestros familiares. Ellos nos piden carnet para demostrar si somos médicos o empleados públicos. Muchas no tenemos cómo transportarnos en camionetas porque no tenemos 100 mil bolívares diarios, ya que las camionetas están cobrando 20 mil bolívares en las rutas de Plaza Venezuela hacia Petare», manifestó la esposa de uno de los internos.
Estas mujeres insisten en que no pueden dejar de alimentar a sus reclusos pues en ese CDP, también conocido como la antigua Zona 7 de la extinta Policía Metropolitana, hay brotes de tuberculosis y varios privados de libertad con desnutrición.
Dejar una contestacion