Equipo UVL, Caracas
Familiares de la población reclusa detenida en los calabozos de la División Contra Extorsión y Secuestro del Cicpc El Hatillo, denunciaron a Una Ventana a la Libertad que los internos fueron golpeados por funcionarios de ese cuerpo policial por negarse a que les botaran los envases donde guardan los alimentos.
Aunque las esposas y madres de los reclusos no saben con precisión qué día fue realizada la requisa, confirmaron que fue efectuada durante la primera semana de septiembre que, casualmente, fue semana de radicalización de la cuarentena en el país, por lo que se les hizo más difícil trasladarse hasta el centro de detención preventiva.
Una de las mujeres relató a UVL que los funcionarios les dieron «planazos» a sus parientes. En ese submundo penitenciario le llaman así a los golpes que recibe la población reclusa por la espalda con un material de plástico.
Las mujeres atribuyen la responsabilidad de los maltratos y abusos de los funcionarios a uno de los comisarios que asumió más poder en esa policía municipal luego del cambio de director en Polihatillo durante el mes de agosto. Sin embargo, no indicaron el nombre del funcionario.
«Una de las madres de los privados de libertad fue a hablar con ese funcionario, pero el Comisario dijo que a él nadie le iba a decir cómo hacer su trabajo, que él es el jefe ahí y es quien manda», refirió una de las mujeres.
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