
Equipo UVL, Caracas
Una Ventana a la Libertad ha recibido denuncias de torturas, por parte se defensores de derechos humanos, y de familiares de la población reclusa que está detenida en el Comando Antiextorsión y Secuestros (Conas) de la Guardia Nacional que está ubicado en Prados del Este.
Una fuga registrada en ese centro de detención preventiva la madrugada del domingo 12 de mayo ha generado, según las denuncias recibidas, detenciones arbitrarias, la muerte de dos fugados que habrían perdido la vida en un presunto enfrentamiento con funcionarios y la recaptura de dos reclusos y de una interna que estaba detenida en ese CDP.
Aunque en principio la cifra de fugados que se reportó fue de siete reclusos, fuentes extraoficiales confirmaron que habrían sido 14 los internos que se fugaron. Hasta la fecha, UVL no ha confirmado identidades de los fugados, de los recapturados y de los presuntos fugados.
En los procedimientos policiales posteriores a la fuga de reclusos las madres de varios de ellos fueron detenidas en allanamientos arbitrarios en sus casas. Pero este lunes 18 de mayo fueron puestas en libertad. Durante su estadía en el Conas las mujeres habrían sido torturadas psicológicamente por los funcionarios con frases como: «Les vamos a devolver a sus hijos en urnas».
En un comunicado anónimo recibido por UVL se denunció que la población reclusa ha sido sometida a torturas. «Los mojan en las madrugadas y les pegan con unas tablas. Tememos por la vida de esos privados de libertad porque durante la cuarentena es más difícil visitarlos y exigir que respeten sus derechos», refiere el escrito.
Según familiares de esa población reclusa, las medidas de seguridad en esa sede del Conas se han extremado después de la fuga: solo reciben sábanas y ropa de color amarillo y la comida debe ser entregada en bolsas. Sin embargo, este fin de semana les permitieron ingresar un pote se plástico por separado para que los internos coloquen los alimentos que les llevan en bolsas.
Nota relacionada:
Dejar una contestacion