Carabobo | Tres policías heridos y 73 traslados fue el resultado del motín en la PNB

Un piquete de la PNB al frente de la sede para evitar el paso de los familiares de los presos | Foto: Cortesía

Rubén Bolívar Idrogo | UVL

Valencia.- El motín que ocurrió entre horas de la tarde y de la noche del domingo 1 de mayo en el Centro de Coordinación Policial Carabobo de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) tuvo como resultado tres funcionarios heridos y 73 presos, 70 hombres y tres mujeres, trasladados al penal de Tocuyito.

De acuerdo al parte policial, a los agentes los identificaron como el supervisor Eduardo Rondón, de 32 años de edad, quien presentó herida craneoencefálica; oficial Breto Rodríguez, de 21, con herida punzo cortante y hemorragia interna en el occipital derecho.

El tercero fue identificado como el oficial Vicente Douglas, de 27 años. Le diagnosticaron politraumatismo generalizado en el cráneo. A los tres los atendieron en la Ciudad Hospitalaria Dr. Enrique Tejera (CHET).

Violación de derechos humanos

El motín que iniciaron en horas de la tarde alrededor de 47 detenidos, de los 251 que hay en la Policía Nacional Bolivariana ubicada en el municipio Los Guayos, región oriental del estado Carabobo, fue en reclamo por la presunta violación de sus derechos humanos y por la muerte de un compañero de celda.

De acuerdo a Mariela Morales, allegada a uno de los privados de libertad, el grupo de policía que estaba de guardia ha venido causándoles maltratos, tanto físicos como psicológicos a los privados de libertad, pero que “la gota que rebasó el vaso”, fue que, supuestamente, dejaron morir a un preso en el pasillo del centro de detención preventiva (CDP).

Morales explicó, que los compañeros de celda al percatarse del mal estado de salud de Samuel Salas, les hicieron varios llamados a los funcionarios de guardia para que lo llevaran a un centro de salud, pero lo que hicieron fue sacarlo y dejarlo abandonado en el pasillo. Salas, producto de la enfermedad que padecía  falleció en horas de la madrugada del domingo 1 de mayo de 2022.

Ante lo que consideraron una violación de los derechos humanos y a la vida, los privados de libertad tomaron como rehenes a los tres oficiales de la PNB e hicieron varias peticiones, entre estas, mejoras en materia de derechos humanos y el traslado de 51 presos ya penados al Complejo Penitenciario Carabobo (penal de Tocuyito), municipio Libertador.

Al momento de hacer las exigencias a las autoridades del ente de seguridad del Estado, los detenidos que lideraban el motín les causaron lesiones y heridas punzo cortantes a los tres funcionarios que habían tomado como rehenes.

Ante la situación violenta de los reclusos, el parte policial indica que se procedió a establecer una comisión negociadora con los presos que actuaban en el motín donde participó una comisión de los Derechos Humanos del estado Carabobo, el fiscal 14 de Asuntos Penitenciarios del Ministerio Público y representantes de la Policía Nacional Bolivariana.

Se conoció de manera extraoficial, que tras varias horas de negociación se llegó a un acuerdo donde se convino el traslado de 73 privados de libertad, 70 hombres al penal de Tocuyito  y tres mujeres para el anexo femenino.

Como medida de seguridad para los presos involucrados en el motín, éstos pidieron dejar pasar a varios familiares para que los acompañaran al momento del traslado hasta el Complejo Penitenciario Carabobo.

Hacinamiento, extorsión y abusos

Belkys Rojas, pariente de un preso, enumeró una serie de irregularidades que viven tanto los presos como los familiares en el Centro de Coordinación Policial Carabobo de la Policía Nacional Bolivariana: “Duermen guindando como murciélagos porque en una celda de 3×3 hay hasta 50  presos; cuando están enfermos no los llevan a ningún centro médico; hay retardo procesal; cobran un dólar por alargar 10 minutos las visitas y cobran hasta 20 dólares para los traslados, y aparte de eso, los familiares tienen que buscar dónde llevarlos hasta el Palacio de Justicia porque en la PNB nunca hay vehículos para los traslados”.

“Y eso no es nada, agrega Rojas, a los que van como custodios tenemos que darles el desayuno o el almuerzo, o llevarlos hasta el comando  y luego irlos a buscar después de la audiencia”.

La madre de un joven preso en este CDP denuncia  través de Una Ventana a la Libertad, que ellos llevan la comida a eso del mediodía y son las 2:00, las 3:00 de la tarde y todavía no se las dan a los muchachos.

“Ellos les tiran la comida en el suelo como si fueran unos perros. Algunas veces ya están dañadas cuando las pasan y eso no puede ser, eso se llama maldad, violación de derechos humanos”.  

Loading

Sé el primero en comentar

Dejar una contestacion

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.


*