Equipo UVL Carabobo
El pranato del Complejo Penitenciario de Carabobo, mejor conocido como penal de Tocuyito, organiza torneo de pelea de gallos con premios en dólares.
A través de las redes sociales se conoció, que los privados de libertad tienen su propio club gallístico en las instalaciones de centro carcelario ubicado en la parroquia Tocuyito, municipio Libertador del estado Carabobo.
El torneo lo programaron para el domingo 06 de octubre de 2019. En el cartel de promoción del evento se aprecia, que los organizadores ofrecen premios en moneda estadounidense.
En la publicidad del evento se lee, que el “Club Gallístico Tocuyito 2019, presenta gran torneo de gallos media cresta”.
El careo es a partir de las 10:00 de la mañana en el “club gallistico” del centro penitenciario. El precio de la entrada es de 10 dólares por silla, mientras la inscripción ese de 25 dólares.
Para el primer lugar hay 400 dólares, el segundo lugar se llevará una marrana grande, mientras que para al mejor montador le entregarán 50 dólares.
Al consultar a algunos activistas, defensores de los Derechos Humanos de los privados y privadas de libertad en las cárceles venezolanas, fueron enfáticos al rechazar dicho evento en el penal de Tocuyito.
Cómo es posible, que muchos presos que padecen de algunas enfermedades, entre estas tuberculosis, y que ha cobrado la muerte a más de uno; las autoridades penitenciarias no les presten asistencia médica como manda la Constitución de la República Bolivariana de Venezolana.
Así como permiten la pelea de gallos, que organicen jornadas de asistencia médica y de salud para todos los privados que tengan alguna patología, pidieron los representantes de varias ONG’s.
Para nadie es un secreto, que en las cárceles y Centros de Detención Preventiva (CDP), en los últimos años han muerto decenas de presos, y la causa principal es por tuberculosis; sin descartar otras enfermedades, sostuvieron.
Por su parte, Lyli López, Directora General Nacional de la Fundación Pro Defensa de los DD y exjueza penal, sostuvo no estar de acuerdo con ningún tipo de maltrato animal porque las cárceles, no pueden ser una ciudad de perdición ni de vicios.
Manifestó, que “hay que desocializar a los privados y penados con educación, cultura y trabajo para socializarlos a una nueva vida productiva; donde se puedan incorporar a la sociedad con una conducta que no sea criminal y de vicios”.
Además adujo, que no es posible que ya sea común hablar de pranes que dominan las cárceles incrementando los crímenes.
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