Eduardo de Jesús Barrera Romero fue imputado por participación en la comisión del delito de tenencia, importación y venta de drogas en grado de complicidad
Giovanna Pellicani
Eduardo de Jesús Barrera Romero estuvo seis años y ocho meses detenidos tras ser procesado y penado por un delito que asegura nunca cometió.
El hombre de 64 años de edad que fijaba residencia en el municipio Juan Antonio Sotillo del estado Anzoátegui, estaba solicitado por la Organización Internacional de Policía Criminal (Interpol), desde el año 2003, había sido imputado y condenado por participación en la comisión del delito de tenencia, importación y venta de drogas en grado de complicidad en Italia, pero explica que nunca estuvo presente en dicho juicio.
“Un día fui visitado en mi trabajo por funcionarios de Interpol. Me dijeron que enfrentaba cargos por venta y comercialización de droga, que tenía una alerta roja y había sido condenado por un juzgado de Italia. Yo tenía como demostrar que no estuve en Italia en ese entonces”, detalló.
Barrera asegura haber quedado sorprendido frente a tal acusación y pese a haber solicitado una explicación al respecto, fue trasladado hasta los calabozos del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), ubicado en el municipio Bolívar del estado Anzoátegui.
Tras varias audiencias y una sentencia firme fue condenado a cinco años de prisión, pero la pena se extendió y fue el 18 de enero de 2023 que recibió su boleta de libertad. Nunca fue informado sobre el delito por el cual lo estaban imputando.
“Fui trasladado al Centro Agroproductivo José Antonio Anzoátegui de Barcelona y cuatro años después fui víctima de una golpiza en medio de una riña que se registró en el penal, meses más tarde sufrí un Evento Cardio Vascular, fue así después de casi perder la vida que me dieron la libertad. Mi defensor público nunca me defendió”, resaltó.
Una vez en libertad Barrera Romero se encontró desorientado en las calles del municipio Bolívar del estado Anzoátegui, donde extravió sus documentos de excarcelación.
“He sufrido durante años por esta gran injusticia y ahora perdí los documentos de excarcelación, necesito recuperarlos, pero no tengo dinero para pagar los trámites. Tengo miedo de que me vuelvan a arrestar de forma injusta”, destacó.
Eduardo de Jesús Barrera Romero asegura que su vida cambió después de ésta detención, por lo que exige al estado venezolano resarcir los daños ocasionados tras los seis años y ocho meses que estuvo en prisión.
Dejar una contestacion