Cerca de las 6:00 de la tarde del 5 de mayo de 2021 se permitió el ingreso de agua potable a las instalaciones del centro de Arrestos y Detenciones Preventivas de Cabimas, en la Costa Oriental de Lago del estado Zulia, luego de que los reclusos mantuvieran a la fuerza a uno de los funcionarios adscritos al Cuerpo do Zulia de Policía Bolivariana del Estado Zulia (CPBEZ), encargado de la custodia.
La lucha entre autoridades y reclusos por el agua potable inició el lunes 3 de mayo de 2021 luego de que un grupo armado hiciera un atentado contra la sede de la 5ta Compañía del Destacamento 113 de la Guardia Nacional Bolivariana, en el municipio Santa Rita, y los militares responsabilizaran a los pranes del recinto de su colaboración y de guardar en sus instalaciones los dos fusiles robados.
Los reclusos detallaron que el último día de visita familiar fue el sábado 1 de mayo de 2021. La jornada se efectuó normal desde las 8:00 de la mañana hasta las 2:00 de la tarde. Dos días después se impidió el paso del camión que distribuye los botellones de agua mineral en el recinto. “Aquí no tenemos agua por tubería, desde hace tres años tenemos un pozo de agua salada cerca de la entrada principal, pero esa agua no la podemos beber. Provoca diarrea y problemas en los riñones porque es muy salada”.
Lo privados de libertad se apoyaron en la difusión de videos cortos para sus denuncias. El primer llamado a las autoridades lo hicieron el martes 4 de mayo de 2021, las reservas de agua potable eran mínimas y necesitaban el líquido. Los primeros en aparecer frente a las cámaras fue un grupo de los enfermos con tuberculosis. Pese a la divulgación masiva de la grabación no hubo respuesta.
Ricardo Lugo, secretario de Seguridad y Orden Público y responsable directo del centro de detención, indicó que desconocía la situación. “Quizá es un retardo por razones de control”.
Unas 24 horas después, los reclusos retuvieron a la fuerza al comisionado López para obligar a negociar a los responsables de la seguridad externa, a la Secretaría de Seguridad y orden Público y de la Zona Operativa de Defensa Integral (ZODI) el ingreso del agua y la comida. La liberación del oficial la grabaron y divulgaron los mismos reclusos como evidencia de que cumplían con su parte en el acuerdo. Unas horas después se permitió el ingreso del agua y se espera que hoy se permita el ingreso de comida.
El retén de Cabimas está bajo las directrices de los privados de libertad desde 2020 luego de la destitución de la abogada Raida Núñez como directora del recinto. La Secretaría de Seguridad se encarga desde entonces algunas jornadas de atención y sirve de mediador en algunos conflictos internos y con la Guardia Nacional Bolivariana, especialmente cuando esta se hace cargo de la custodia externa o instala módulos de control en la entrada del penal. Cada bvez que se militariza los alrededores de centro de arrestos se duplican las denuncias, la manera de castigo de los militares es impedir el ingreso de agua y comida a las instalaciones. La medida se mantiene, en ocasiones, hasta por 15 días continuos. Por esta misma razón, salieron a protestar, el 28 de septiembre de 2020, los reclusos en la avenida Andrés Bello.
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